Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
El conde Drácula era en realidad una de esas criaturas de las que se pensaba que solo existían en los cuentos y las leyendas populares, una de esas que se alimentan de la sangre de los vivos para lograr la inmortalidad. Drácula era lo que sus paisanos llamaban “Nosferatu”, el No Muerto. Te costará menos reconocer a la criatura por su nombre más común: vampiro. Drácula es un enemigo sabio y astuto. No puedes huir y no hay lugar donde esconderse. Has de enfrentarte y luchar.
Busca, querido lector, en el interior de tu alma al héroe que quisieras ser y logra que el valor te alcance hasta clavarle un puñal en su corazón. Aún así, no descartes la posibilidad de que habiéndolo convertido en cenizas, este auténtico demonio reaparezca en tus sueños.
Abraham “Bram” Stoker fue un novelista y escritor irlandés, mayormente conocido por su novela Drácula, de 1897. Nació el 8 de noviembre de 1847en Dublín, Irlanda y falleció en Londres el 20 de abril de 1912.