Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
Alegres, como siempre, y sabedores de que los nasobucos ocultan las sonrisas; con las manos en alto, estos alumnos de 4to. grado de la Escuela Primaria José Martí, situada en Obispo entre Aguacate y Villegas, expresan al fotógrafo la felicidad de volver a sus clases en el espacio que, gracias al Proyecto Aulita-Museo de la Oficina del Historiador, ha reservado la Biblioteca Pública Provincial Rubén Martínez Villena de La Habana. Aquí, bien cerquita de la información adicional que puedan requerir sus estudios; con un programa de talleres y actividades diseñadas para su divertimento, crecimiento cultural y emocional; siempre privilegiando el acercamiento a la lectura, la biblioteca se esmera en la formación del hombre y la mujer nuevos.