Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
La Habana llega el 16 de noviembre a su 505 aniversario, y a los habaneros nos sigue alegrando hallar la imagen de Leal en nuestras calles y recordarlo vivo, porque es injusto creer que haya muerto cuando para honrarlo debemos trabajar sin descanso, luchar con su ejemplo para preservar lo que él logró y seguir sus, ahora invisibles pasos, para que La Habana nunca muera y su alma siga vibrando en ella.