Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
En busca de un tiempo perdido reúne tres cuentos que Ariel Ribeaux Diago (La Habana, 7 de diciembre de 1969 – 15 de mayo de 2005) escribió para leerlos como un todo.
“En busca” nos habla de un niño y su hermana que coleccionan bichos verdes (de esos que suenan) y un día entienden que les falta la pareja del grillo, cuando les cuentan que se llama Esperanza ya están en camino de saber que la esperanza es también otra cosa que todos necesitamos y no les puedo contar más.
En el segundo cuento que se llama “De un tiempo”, es la historia de un niño que descubre que sus padres han regresado a la infancia y él tiene que asumir la responsabilidad desesperante de verlos actuar como pequeñines y de criarlos y no les puedo contar más.
El niño del cuento “Perdido”, se avergüenza de ser el hijo del payaso del circo pues los chicos del barrio se burlan de él. Un buen día el padre desaparece debido a un error durante un acto de magia, la madre se casa de nuevo, esta vez con el domador, un hombre mandón, violento, de mal carácter, el niño pierde entonces… lo siento, no puedo contarte más.
Pese a su juventud Ariel supo andar por el camino difícil de la infancia y ver con originalidad, más allá, un mundo mejor. Su trágico final debido a un atentado a balazos en Guatemala dejó una marca muy triste en la LIJ cubana. En busca de un tiempo perdido mereció el Premio David 1995 y el premio La Rosa Blanca en 1997.