Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
Peligrosos prados verdes con vaquitas blanquinegras, es un libro de cuentos que obtuvo los premios La Edad de Oro en 2007 y La Rosa Blanca en 2009 pero el objetivo del autor no era ganar esos premios sino hacer que sus lectores riéramos mucho, no nos atreviéramos ni por un momento a abandonar su lectura y más que todo eso: hacernos pensar, reflexionar, interpretar nuestra época y saber que podemos mejorar el mundo de todos partiendo de una infancia que aprende riendo mucho.
Peligrosos prados verdes con vaquitas blanquinegras, es un libro de cuentos que obtuvo los premios La Edad de Oro en 2007 y La Rosa Blanca en 2009 pero el objetivo del autor no era ganar esos premios sino hacer que sus lectores riéramos mucho, no nos atreviéramos ni por un momento a abandonar su lectura y más que todo eso: hacernos pensar, reflexionar, interpretar nuestra época y saber que podemos mejorar el mundo de todos partiendo de una infancia que aprende riendo mucho.
Asuntos diferentes hallamos en estos cuentos, asuntos que inciden en la vida moderna y si empezamos por el que da título al libro sentiremos todos la seriedad con la que Rubén aborda las tensiones fronterizas y las ridiculiza al extremo, valiéndose de un paseíto de Leidi Jámilton a un país de afüera. El afüera que él utiliza con tanta gracia y chispa en este original cuento. Luego, en La casa bruta, veremos que apunta con humor y gran fantasía futurista a los excesos de tecnología en el hogar, haciéndonos a la par acariciar las tradicionales labores domésticas que aun perviven. Los pájaros es la manera que construyó Rubén para hablar a los niños de la tolerancia y la aceptación entre las personas. No adelantaré nada más, descubran los lectores el resto reflexionando, sonriendo o riendo a carcajadas.
Peligrosos prados verdes con vaquitas blanquinegras, editado por Gente Nueva y premiado en el concurso La Edad de Oro 2007, contiene 18 cuentos y 45 ilustraciones de Ángel Velazco Hernández.
Ser original en la literatura para niños cada día se hace más difícil pero no para Rubén (Jorge) Rodríguez González, narrador, periodista, editor, comentarista radial y crítico de arte, natural de Floro Pérez, municipio de Gibara, Holguín, donde su cigüeña lo entregó a la familia el 12 de enero de 1969. Rubén Escribe desde los treinta años y acumula más de veinte títulos publicados. En 2020 recibió el Premio de los lectores, por La retataranieta del vikingo, galardón que se entrega cada año a los 10 libros más vendidos o de mayor circulación comercial en Cuba.