Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
Los viajes de Gulliver constituyen una crítica muy imaginativa a la sociedad que incluye la sátira personal y política, aventuras placenteras, situaciones extraordinarias y lecciones de moral. Fueron publicadas en 1726 han tenido un enorme éxito como clásico de la literatura universal y de la literatura infantil y juvenil que ha inspirado adaptaciones al cine y a los animados además de constituir un exitazo de ventas y ediciones.
El protagonista es el médico-cirujano Lemuel Gulliver que como el Robinson de Daniel Defoe, naufraga debido a una tormenta y con él nos lleva al País de Liliput donde convivimos una imaginativa temporada con liliputienses que no superan las 6 pulgadas de estatura. Más adelante, debido a otra tormenta durante su segundo viaje, llegaremos a la isla Brobdingnag habitada por gigantes de 60 pies de altura cuya reina lo quiere como mascota y le asigna una niña para que lo cuide y le enseñe el idioma. Este viaje está lleno de eventos tan graciosos que hacen el deleite de los niños y adultos. Los accidentes y los viajes seguirán sucediéndose para constituir una larga peregrinación por la aventura que experimentarán los lectores con mucho placer tras las huellas de Gulliver, el inteligente, valiente, extrovertido, amable protagonista que nos invita a pensar en cosas como la inmortalidad no es igual a la felicidad y que muchas guerras surgen a raíz de ganar nuevas posesiones y el afán por demostrar la eficacia de las armas que atemorizan al mundo.
Jonathan Swift nació en Dublin, Irlanda, el 30 de noviembre de 1667 y falleció el 19 de octubre de 1745. Era muy excéntrico, ingenioso y humorista a pesar de que pasó su infancia en la indigencia. Es considerado un héroe del nacionalismo irlandés.