Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
5 de junio – Día Mundial del Medio Ambiente
El cuento que les ofrecemos servirá a los adultos para que en estos momentos de confinamiento expliquen a los pequeñitos de la casa la importancia del medio ambiente. Concluida la lectura deben preguntarles acerca de lo aprendido y darles hoja y lápices para que dibujen sobre el tema. El mundo de hoy y del mañana les estará agradecido.
El sol que no tenía memoria
Hace muchos, muchos años había un árbol y un pájaro que eran amigos y vivían juntos.
Un buen día, el sol, que era algo despistado, se olvidó de pasar por aquel lugar durante muchos días.
El pobre árbol empezó a sentir mucho frío y a perder todas las hojas.
Él no estaba cubierto de plumas como su amigo el pájaro.
Entonces el árbol pidió ayuda al pájaro:
-Buen amigo, ve a buscar al sol, que yo no tengo abrigo.
Pero el pájaro le contestó:
-No lo puedo alcanzar, vuela muy alto y no sabré regresar.
El pájaro pidió ayuda a una nube que pasaba por allí:
-Nube ligera, ve a buscar al sol, que yo no puedo.
Pero la nube no se atrevía a ir sola y le contestó:
-Iré con el viento, que conoce el camino y lo hará contento.
Cuando el viento empezó a soplar, la nube le dijo:
-Viento, vientecito, vamos a buscar al sol, que tienen frío.
Y entre los dos trajeron a aquel sol despistado.
Y con el sol volvieron a crecer las hojas, las flores, vinieron las mariposas
Y aquel lugar recuperó la sonrisa.
Al terminar los dibujos, hagan que los sostengan y ¡retrátenlos!